Viernes 25 Octubre
Lucas 12, 54-59
~ Cuando ven una nube que se levanta en el occidente,
al momento dicen: ‘Va a llover’, y así sucede ~
Jesús se dirige nuevamente a las multitudes, que lo habían seguido de forma tumultuosa. Insiste en que vayan más allá en la interpretación de la ley judía y de la historia. Deben interpretar el momento presente, en que se encuentran, como un tiempo de cambio y de enmienda. Si lo están escuchando, es porque en el fondo desean algo más de lo que ofrecen sus dirigentes políticos y religiosos.
Jesús les reclama que sepan interpretar las señales de la naturaleza, pero no las de la historia. Están acostumbrados a sacar conclusiones en lo que no los compromete, mas no en aquello que les demanda una opción existencial.
Si quieren seguir a Jesús, necesitan sacudirse el influjo de los fariseos. Jesús exhorta a sus seguidores a independizarse de ellos. A ir más allá de su doctrina para saber lo que es bueno o malo. Quienes siguen a Jesús han de ser capaces de generar sus propios juicios, y actuar en cada circunstancia lo que mejor convenga. Así, de forma indirecta, Jesús sugiere que para procurar la justicia, más que el recurso legal, conviene la mutua buena voluntad: Cuando vayas con tu adversario al magistrado, procura en el camino arreglarte con él.
Está claro que urge interpretar nuestra historia desde la libertad, sacudiéndonos los condicionamientos ideológicos, legales y culturales de los que siempre hemos dependido. Lo que Jesús nos ofrece es vivir bajo los juicios de Dios, que son de esperanza y de gracia. Si viviéramos en el mundo bajo el solo derecho positivo y la justicia legal de nuestro país, jamás podríamos alzar la cabeza y contemplar que el momento que vivimos es, al mismo tiempo, un momento de libertad, de justicia y de salvación.
Aprendamos a interpretar desde la justicia y gracia de Dios. Entonces gozaremos de entender lo que muchos otros, por más que se esfuercen, no alcanzarán; y de vivir la libertad que solo el conocimiento trascendente de Dios, su justicia y su gracia pueden dar.
¡Interpretemos el tiempo en que vivimos!
Oración:
Señor Jesús, me descubro costumbrista y acomodado a los moldes de nuestra micro-sociedad. No sé en qué momento de mi vida me dejé imbuir de las ideologías temporales. Al escuchar tu Palabra se me alegra el corazón; de ahora en adelante quiero interpretar mi vida por propia cuenta, sin recurrir a otra doctrina que no sea la tuya, ni a otros preceptos que no sean los de tu justicia. Ayúdame a ser libre, a interpretar mi vida, y las decisiones que tomo en ella, desde tu sabiduría y gracia. Que en mi entorno laboral sepa transmitir la alegría que produce el saberme pleno en las decisiones que tomo, de manera particular, cuando estas decisiones tienen que ver con la justicia para los demás.
Permite que junto con los míos, desde nuestro hogar, nos dediquemos a interpretar los signos de los tiempos; que nos atrevamos a optar por la nueva vida que nos ofreces. Amén.