Seamos Grandes
Miércoles 8 Junio
Marcos 10, 32-45
~ El que quiera llegar a ser grande entre ustedes,
que sea su servidor,
y el que quiera ser el primero, que sea el siervo de todos ~
Santiago y Juan, no se dan por enterados del anuncio de Muerte/Resurrección que Jesús les viene dando, mientras suben a Jerusalén. No entienden del todo que Jesús va a enfrentar el sistema injusto que domina y explota al pueblo, y a entregar la vida, de ser necesario. A quienes siguen a Jesús en este ascenso los podemos distinguir en dos grupos: el de los Doce discípulos, que están desconcertados; y los seguidores no israelitas, que tienen miedo.
Sorprende que estos dos discípulos manifiesten su ambición, y que esperen a que Jesús ocupe el trono de Israel, para obtener ellos, los primeros puestos. Tendrán que entender que la sociedad alternativa del Reino de Dios que Jesús está fundando, excluye de forma radical, el poder y el dominio. Jesús invierte la forma de ser grande. Es solo si somos libres para servir que crecemos en una relación trascendente.
En cuanto al ejercicio de la autoridad en la comunidad cristiana, Jesús advierte: “Saben que los gobernantes dominan las naciones como si fueran sus dueños, y los poderosos los oprimen. Que entre ustedes no sea así…”; hemos de interpretar que en la comunidad de Jesús no hay otra autoridad que la del servicio, el sacrificio para ayudar a crecer a todos.
Es fácil advertir que quien ejerce la autoridad, tiende al dominio, y en ocasiones a la tiranía y a la explotación de los demás. Sucede tanto en lo político como en el religioso. El deseo de poder sin una firme actitud de servicio, tarde o temprano pierde su esencia. La comunidad cristiana en cambio, se realiza en el ejercicio del mutuo servicio que nos iguala a todos los miembros. Es la única forma de vivir la auténtica comunión entre nosotros y con Dios.
El que sirve sin otro interés que el de comunicar vida y amor, al estilo de Jesús, ese crece, no tiene tope a donde ha de llegar, y se hace en verdad grande.
¿Cuánto deseas desarrollarte? ¿Qué tan grande quieres llegar a ser?
Oración:
Señor Jesús, calma mis ambiciones mal entendidas.
Que nuestro ejercicio de autoridad en familia y en nuestro apostolado, siempre sea una expresión de gratitud a ti, por los dones que hemos recibido, y un alegría inmensa de ayudar a crecer a nuestros hermanos. Amén.